
Toma mis manos y eleva las al cielo
de una nostalgia consumida
donde la distancia paga el precio
de la sencilles de mi alma
que se eleva ante el desencanto
de unas palabras
que una vez fueron mías.
Toma mis manos y ante una plegaria
recorre en un silencio prolongado
la clarividencia de un sueño
que desterrado de las sombras
inmaculan a un Dios griego
y en simple calvario
recorre su cruz bajo su nombre.
Toma mis manos y veras que aguardaras
que el presente te hace ver
la razón de la justicia
y no la piedad del rencor consumido.
Toma mis manos
y pon en mis labios una sonrisa
que te dejara ver la luz
en un destello el futuro
que te pertenece en una simple reflexión
pliega tu oda
y alza sus manos hacia el universo.
Angelross
de una nostalgia consumida
donde la distancia paga el precio
de la sencilles de mi alma
que se eleva ante el desencanto
de unas palabras
que una vez fueron mías.
Toma mis manos y ante una plegaria
recorre en un silencio prolongado
la clarividencia de un sueño
que desterrado de las sombras
inmaculan a un Dios griego
y en simple calvario
recorre su cruz bajo su nombre.
Toma mis manos y veras que aguardaras
que el presente te hace ver
la razón de la justicia
y no la piedad del rencor consumido.
Toma mis manos
y pon en mis labios una sonrisa
que te dejara ver la luz
en un destello el futuro
que te pertenece en una simple reflexión
pliega tu oda
y alza sus manos hacia el universo.
Angelross
...un poema muy sentido; enhorabuena, Alba: sigue escribiendo... ; )
ResponderEliminarGracias Guille...me alegro que te guste...-)
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